viernes, 23 de marzo de 2012

SEÑALES MARÍTIMAS. CÓDIGO DE SEÑALES





La navegación marítima dispone de una serie de señales para comunicación, identificación o información que le son propias y específicas, dentro de estas señales podemos diferenciar dos grandes grupos :
  • Las situadas o emitidas desde los barcos, a bordo.
  • Las situadas en el exterior, bien en tierra o desde la superficie del mar.
Todas ellas pueden ser luminosas, sonoras o simplemente visuales, estáticas o en movimiento, en esta primera entrega sobre el tema abordaré las utilizadas para transmitir mensajes por medio de banderas, (semáforo), sistema normalizado que permite la comunicación de un barco con otros o con tierra firme si no existen otros medios, al igual que entre dos puntos en tierra firme. Este sistema de transmisión de mensajes es muy simple y permite la comunicación visual a corta distancia, siendo fundamentalmente las marinas de guerra aquellas que más lo utilizan. Desde la aparición de la radio y satélites de comunicación el uso de este sistema para transmitir mensajes ha disminuido notablemente, no obstante sigue estando plenamente vigente.

El sistema lo componen fundamentalmente 26 posiciones de un par de banderas, teniendo cada posición un significado alfa-numérico, dependiendo de su posición y combinación, para representar así cada una de las letras del alfabeto y los números del uno al cero. Existen además otras 6 posiciones normalizadas para definir frases completas con una sola combinación de las dos banderas El marinero encargado de la transmisión sostiene una bandera en cada mano y posiciona estas de acuerdo con la letra o número que quiere representar. La adecuada lectura y transcripción de las señales recibidas conformaran finalmente la frase o frases que el mensaje contiene. Ambas banderas son idénticas , divididas en dos triángulos rectángulos iguales uno de color rojo y el otro amarillo, en la imagen se representan las letras y números sí como las otras seis posiciones utilizadas :


Como puede apreciarse, ampliando la imagen, para representar cada letra se mueven las banderas en el sentido de las agujas de un reloj, el resto de posiciones normalizadas representan :

  • Inicio y final de transmisión de palabras
  • Inicio y final de transmisión de números
  • Anulación
  • Error (2)
  • Atención
Además del sistema descrito existe un Código Internacional de Señales en el que también se utilizan banderas, no para transmitir mensajes sino para informar de determinadas situaciones  o incidencias a bordo. El número de banderas es igualmente de 26, cada una con su nombre propio, y la información que representan se corresponde cada una con una bandera diferente :



A. Alfa.Tengo un buzo sumergido. Manténgase alejado y reduzca velocidad




B. Bravo.Estoy cargando, descargando o transportando mercancías peligrosas




C. Charlie. Afirmativo




D. Delta. Maniobro con dificultad, manténgase alejado




E. Echo. Estoy virando a estribor




F. Foxtrot. Tengo avería. Comuniquen conmigo




G. Golf. Necesito un práctico




H. Hotel. Tengo un práctico a bordo




I. India. Estoy virando a babor




J. Juliet. Tengo un incendio y llevo mercancías peligrosas. Manténgase alejado




K. Kilo. Deseo comunicarme con usted




L. Lima. Detenga su barco inmediatamente




M. Mike. Mi barco está parado y no se pone en marcha




N. November. Negativo




O. Oscar. Hombre al agua





P. Papa. Todos los hombres a bordo.El barco se hace a la mar





Q. Quebec. Mi barco esta bien.Solicito libre navegación.





R. Romeo. Recibido





S. Sierra. estoy dando marcha atrás





T. Tango. Estoy pescando al arrastre en pareja. Manténgase alejado





U. Uniform. Se dirige usted hacia un peligro





V. Victor. Necesito auxilio.





W. Whiskey. Necesito asistencia médica





X. Xray. Suspenda sus maniobras y preste atención a mis señales





Y. Yankee. Estoy maniobrando hacia atrás para fijar el ancla





Z. Zulú. Necesito un remolcador







Benito Sacaluga



Fuentes: (OMI) Organización Marítima Internacional.

domingo, 18 de marzo de 2012

DESTRUCTOR "CHURRUCA"





Destructor "Churruca"

Churruca es el nombre dado por la Armada Española, en homenaje a D. Cosme Churruca y Elorza, Brigadier de la Real Armada, a una serie de destructores construidos en astilleros españoles a partir de la clase Scott de la marina de guerra británica. De esta clase se construyeron dos series siendo el último de la primera el "Almirante Valdés", serie a la que también pertenecía el "Churruca". Desde 1927 hasta 1937 salieron de los astilleros de Cartagena un total de 16 unidades, de las cuales dos fueron vendidas a la Armada argentina, el resto quedaron en poder de la Armada española; eran barcos de excelentes prestaciones, gran velocidad y poderoso armamento. Una vez terminada la guerra de España (1936-1939) se construyeron dos unidades más de esta clase, el "Álava" y el "Liniers".

Relación de las dos clases por fecha de botadura:

Primera Clase

  • 1928 Sánchez Barcaiztegui 
  • 1929 José Luis Diez
  • 1929 Almirante Ferrandiz
  • 1930 Lepanto
  • 1931 Churruca
  • 1931 Alcalá Galiano
  • 1933 Almirante Valdés
Segunda Clase:
  • 1935 Almirante Antequera
  • 1936 Almirante Miranda
  • 1936 Ciscar
  • 1936 Escaño
  • 1936 Gravina
  • 1937 Jorge Juan
  • 1937 Ulloa
Los 14 destructores relacionados se mantuvieron en 1936 integrados en la Flota Republicana.



Destructor Churruca 


Su desplazamiento, como el del resto de su clase, era de aproximadamente 1.800 toneladas a plena carga y reunía las siguientes características :

Dimensiones

Eslora:101,98 metros
Manga :9,68 metros
Calado : 3 metros

Propulsión

4 Calderas Yarrow
Turbinas de vapor Parsons
2 Hélices

Prestaciones

Velocidad máxima : 36 nudos = 67 Km/hora 
Autonomia : 4.500 millas a 14 nudos

Armamento

5 Piezas de 120/50
2 Cañones antiaéreos Vickers de 76,2/45
4 Ametralladoras
6 Tubos lanzatorpedos de 21 pulgadas
Cargas de profundidad

Tripulación

160


Cañón antiaéreo Vickers

Misiones durante la Guerra Civil



El Destructor "Churruca" estaba basado en Cartagena en julio de 1936, como buque insignia de la 2ª Flotilla de Destructores y al mando del CN Fernando Barreto Palacios.  La sublevación le sorprende en la bocana del puerto de Ceuta. Conocida por su comandante la sublevación, el día 18 entra en el puerto. Su comandante se une a la sublevación y esa misma noche embarca en el "Churruca" el Primer Tabor de Regulares y el buque pone rumbo a Cádiz.

Una vez desembarcadas en Cádiz las tropa sublevadas, se procede a la "depuración" de aquellos miembros de la tripulación supuestamente contrarios a la sublevación, y el destructor parte de nuevo rumbo Ceuta, junto al buque correo "Ciudad de Algeciras", para recoger nuevos contingentes de tropas con destino a la península. Ya en alta mar, la tripulación leal al Gobierno detiene a los jefes y oficiales, pone rumbo a Málaga y consigue poner el destructor al servicio de la República. Días más tarde se nombra como comandante del buque al AN Luis Núñez de Castro.


"Ciudad de Algeciras"
Imagen. trameships
En junio de 1937 formó parte de una flotilla compuesta por los buques de su clase: "Almirante Miranda", "Lepanto", "Almirante Valdés", "Gravina" y "Sánchez Barcaiztegui", encargada de dar escolta al buque petrolero "Campillo". Entabló combate con el crucero rebelde "Baleares", después de cerca de dos horas de intenso cañoneo ambas formaciones abandonaron el combate sin más consecuencias.

Es asignado a las misiones de bloqueo del Estrecho de Gibraltar, donde en junio de 1937 es alcanzado por un torpedo lanzado por el submarino italiano "Jalea", perteneciente a la primera de las seis manadas de submarinos legionarios italianos, que junto al "Otaria" vigilaban la costa de Cartagena; El destructor resulta dañado y mueren 3 tripulantes, resultando nueve heridos de gravedad. A pesar del impacto consiguió regresar al puerto de Cartagena. Ya reparado y al mando del TN Manuel Núñez Rodríguez, el 7 de septiembre de 1937 toma parte en el combate de Cabo Cherchel.

En 1938 es alcanzado durante un bormbardeo de aviación sobre Cartagena, resultando con daños de gravedad, permaneciendo en ese puerto hasta el fin de la guerra.

Acabada la guerra y ya bajo bandera franquista, en el transcurso del conflicto de Ifni, participó junto al crucero "Canarias", el "Méndez Núñez" y cinco destructores de su misma clase en una "demostración naval" frente al puerto de Agadir. El resto de sus actuaciones bajo bandera franquista se limitan a maniobras y misiones protocolarias.

Causó baja en la Armada el 29 de octubre de 1963.



Benito Sacaluga



jueves, 15 de marzo de 2012

LAS BANDERAS DE LA ARMADA REPUBLICANA





El 14 de abril 1931 se proclama en España el sistema republicano como forma de organización del Estado en sustitución de la monarquía, este periodo pasa a denominarse II República para diferenciarse del primer periodo republicano establecido en el siglo XIX.

El periodo de permanencia de la II República se limita a ocho años escasos (1931-1939), tres de los cuales (1936-1939) se desarrollan en situación de guerra civil, duración esta mucho más extensa que la vivida por la I República, menos de un año de vigencia (1873-1874), abolida a raíz del golpe de estado del general Pavía y el  pronunciamiento del general Martinez Campos que da paso a la restauración borbónica en España.

Tres militares, tres generales, Pavía, Martinez Campos y Franco, a través de golpes de estado mediante el uso de la fuerza y los medios que el Estado republicano puso a su disposición para la defensa de España, son los principales responsables de la abolición de los dos sistemas republicanos españoles que vieron la luz en los siglos XIX y XX, para, en ambos casos, restaurar la monarquía en España, monarquía que desde 1975 aún existe como forma de estado.

Durante la II República se modifican las banderas y estandartes de la nación y los ejércitos. La Armada establece, entre otras, las siguientes enseñas para sus diferentes significados:











En 1939 con la victoria de las tropas sublevadas y la instauración de la dictadura franquista como forma de estado, todas las banderas, sea cual sea su aplicación, son modificadas de acuerdo con la estética franquista, ya utilizadas por los golpistas desde el 2 de febrero de 1938 con el águila de San Juan como motivo inseparable, convertido además en el escudo de la nación , omnipresente símbolo del franquismo y que aún hoy en día permanece en multitud de ubicaciones civiles y militares en claro incumplimiento de la ley que ordenó su eliminación a nivel general.


Benito Sacaluga






viernes, 9 de marzo de 2012

CARTAGENA SUBLEVADA.QUINTA COLUMNA.






Una vez en poder del bando franquista las plazas de Cataluña y Baleares y la escasas consecuencias que para el devenir de la contienda supuso la victoria republicana en las batalla navales de Cabo de Palos, la Flota permanece fondeada en el puerto de Cartagena sometida a un estado de desaconsejable inacción. Además en febrero de 1939 se habían dejado de recibir suministros procedentes de la Unión Soviética y la nueva situación en el Mediterráneo, una vez sometida Cataluña comprometía las rutas de los barcos que los transportaban.

A mediados de febrero el Gobierno de Juan Negrín se instala en las poblaciones alicantinas de Elda y Petrer, próximas al aeródromo militar de Monovar, dando lugar a la denominada Posición Yuste. Este emplazamiento y el traslado de la plana mayor del PCE a la cercana localidad de Elda, hace pensar al PSOE que se trata de un posicionamiento favorable a la salida de España de los comunistas ante el inminente desenlace desfavorable de la guerra, ya en situación más que critica para las fuerzas gubernativas.

Días después, concretamente el 12 de febrero los generales republicanos Escobar y Matallana hacen llegar a Negrin un razonado, aunque muy optimista informe por el que se muestran capaces de hacer frente con éxito a una nueva ofensiva de los franquistas, en base a este argumento demandan el inicio de conversaciones con los sublevados a efectos de poner fin a la guerra. Opción y demanda aún más justificada para ellos el 26 de febrero, fecha en la que el régimen de Franco es reconocido por los gobiernos de Francia y Reino Unido, para más inconveniente el 28 de febrero Manuel Azaña, desde París, dimite como Presidente de la República, dando mayor peso y viabilidad a la conspiración entre anarquistas, socialistas y ciertos militares para derribar el Gobierno de Negrín, anulando así al PCE y consiguientemente retomar sin cortapisas las conversaciones con los fascistas para un fin negociado de la guerra, una rendición republicana con condiciones, al fin y al cabo una rendición.

Para hacer frente a  esta situación y con el objetivo de sembrar cierta imagen de seguridad en la lealtad de los militares, Negrin promueve importantes ascensos y sitúa a lideres comunistas al frente de la Base Naval de Cartagena, estos movimientos se producen el 2 de marzo.

Los conspiradores, reunidos en torno al Coronel Casado, desconfían y ven estos movimientos como una estrategia de Negrin y del PCE para asegurarse el control de puertos y aeródromos y permitirles así abandonar España en cualquier momento y sin mayores dificultades..

En Cartagena la situación era de elevada tensión, a causa principalmente de la imposibilidad de movimientos de la Flota y por el constante crecimiento de la Quinta Columna franquista. Durante 1938 la infiltración de simpatizantes franquistas había puesto en guardia a las fuerzas republicanas, pero el devenir de la contienda provocó que los quintacolumnistas aspirasen a protagonizar acciones de gran relevancia con la supuesta ayuda de parte de las dotaciones de los buques de la Flota, donde había buen número de casadistas, como por ejemplo la toma del puerto y la base para su posterior entrega a las fuerzas franquistas.
 
Juan Negrín manda a Cartagena a Paulino Gómez Sáenz, Ministro de la Gobernación, para informar a los mandos militares y navales que la resistencia a ultranza aún era posible, y en esa lógica era preciso designar al comunista Francisco Galán como jefe de la Base Naval de Cartagena. Los argumentos de Gómez fueron plenamente rechazados, incluso por el Jefe de la Flota Republicana. No obstante  el 3 de marzo se publicó el nombramiento de Francisco Galán como Comandante en Jefe de la Base de Cartagena y se determinó que la 206ª Brigada Mixta  preparase su marcha hacia la zona para abortar cualquier intento de sublevación.

No hay tiempo. Ante los rápidos acontecimientos, al anochecer del 3 de marzo estalla la sublevación en Cartagena, dirigida por el capitán Fernando Oliva, Jefe de Estado Mayor de la Base; el coronel de artillería Gerardo Armentia y el comandante quintacolumnista Manuel Lombardero, tomando el control de la base naval y el puerto. Las fuerzas de tierra sublevadas al mando de Oliva se dirigen a la comandancia, allí arrestan a Francisco Galán y le exigen dimitir, pero a lo largo del 4 de marzo el cariz de la revuelta cambia; Oficiales republicanos como Armentia se ven superados por los elementos más proclives al bando franquista, los cuales empiezan a transmitir por radio consignas y lemas del bando nacional proclamando que la Base Naval de Cartagena y el puerto obedecerían al gobierno fascista.

Al conocerse este mensaje el Estado Mayor franquista ordena que zarpen desde Castellón y Málaga más de 30 buques entre transportes (entre ellos el tristemente famoso Castillo de Olite) y buques de guerra, entre los que se encuentra el crucero pesado "Canarias".

El ex-ministro comunista, Jesús Hernández, actuando bajo su propia responsabilidad como Comisario General del Ejercito, envió en auxilio de Cartagena a la 4ª División en la que iba incluida una unidad acorazada de la base de Archena.


En paralelo, el almirante republicano Miguel Buiza mantenía una cierta neutralidad, negándose a cambiar de bando y poner la Flota al servicio de Franco, pero a la vez rechazaba también el intento de Negrín de imponer en la Base Naval el mando de un militar comunista.  Gran parte de los marineros eran simpatizantes anarquistas y se resistían al intento del gobierno de ponerlos bajo la autoridad de un jefe comunista. Así, el 4 de marzo toman posesión de todos los buques de la flota. Al ser evidente que la 206ª Brigada, comandada por Artemio Precioso, se dirige hacia Cartagena y amenaza con aplastar la rebelión pro-franquista, el 5 de marzo a mediodía los marineros y oficiales a bordo de los buques abandonan el puerto y se hacen a la mar, evitando la posibilidad de ser derribados por las baterías costeras de Cartagena en poder de los franquistas y a la espera de acontecimientos, valorando entretanto la opción de huir con la flota hacia el norte de África.

El golpe de estado contra Negrín y la formación del Consejo Nacional de Defensa en la noche del 5 de marzo termina por aumentar la confusión entre las unidades de la flota republicana, y el día siguiente el Almirante Buiza ordena a la Flota, hasta entonces navegando junto al puerto, poner rumbo a África. La flota republicana arriba a Bizerta (Túnez) el 11 de marzo , donde se solicita a las autoridades asilo político para todos sus componentes, en respuesta las dotaciones son  recluidas en el campo de concentración de Meheri Zabbens. Días más tarde los marinos  franquistas viajan a Bizerta y se hacen cargo de la totalidad de la espléndida Flota. Las dotaciones de los buques de la desaparecida Flota Republicana comienzan su largo y penoso exilio.

El 6 de marzo la Brigada Mixta 206ª , (unidad precursora de las actuales compañías de operaciones especiales), entra en Cartagena ocupando el Arsenal, varias baterías costeras, el control del suministro eléctrico y las líneas de comunicación. Al día siguiente ocupan el Parque de Artillería y las baterías de costa restantes, a mediodía la Brigada ya se había hecho con el control total de Cartagena y todas sus instalaciones militares, habiendo apresado además  a los sublevados y quintacolumnistas.

La sublevación de Cartagena había sido sofocada, aunque resultase finalmente inútil como consecuencia, entre otras cosas, de la marcha de Negrin y la intervención de Casado.

Nos queda una incógnita importante y es saber que hubiera sucedido si la Brigada Mixta hubiese actuado antes, parece correcto pensar que la Flota habría permanecido en el puerto y a disposición del Gobierno y Franco no habría mandado sus barcos a ocupar lo que ya erróneamente se consideraba para muchos territorio franquista recién conquistado.


Benito Sacaluga

Fuentes : Hugh Thomas ISBN 84-226-0873-1.Bruno Alonso ISBN 84-96133-75-3




QUINTA COLUMNA


La expresión, atribuida por unos a Mola y por otros al General Varela, se usa desde 1936 para denominar en tiempos de conflicto bélico a los sectores de la población que mantienen lealtad hacia el bando enemigo, colaborando con este desde la clandestinidad e infiltrados en el ejercito que defiende la zona o el país. Se trata pues de un conglomerado de personas desleales a la comunidad donde residen, colaboracionistas de muy diversas formas con el enemigo.
En la Segunda Guerra Mundial la expresión se siguió utilizando, en este caso la Quinta Columna estaba formada por aquellos franceses, centro-europeos,etc...,que deseaban el triunfo de la invasión de sus países por la fuerzas nazis y a tal efecto colaboraban de diversas formas con el III Reich.